El gobierno estadunidense anunció que el 5 de diciembre transfirió a México a 14 prisioneros que estaban bajo su custodia, cumpliendo sentencias federales relacionadas con tráfico de drogas y ofensas con armas de fuego, o ambos delitos.
Todos los prisioneros son mexicanos y fueron retornados a su país de origen bajo el Tratado de Transferencia Internacional de Prisioneros entre ambos países, según una ficha de prensa del Departamento de Justicia.
La dependencia no dio a conocer la identidad de los prisioneros, aunque detalló que “los términos faltantes de sus sentencias corren de los 22 meses hasta los cuatro años y medio”.
Según Washington, los 14 prisioneros solicitaron su transferencia a los Estados Unidos, y tras la aprobación de ambos gobiernos, el movimientos ocurrió este 5 de diciembre desde Estados Unidos a México, donde los presos cumplirán su condena.
“Esas transferencias fueron conducidas a través de Programa Internacional de Transferencia de Prisioneros. La División Criminal de la Unidad Internacional de Transferencia de Prisioneros, ubicada en la Oficina de Asuntos Internacionales, Administra el programa y coordina todas las transferencias basadas en el tratado (…) el mismo tratado también permite a nacionales estadunidenses encarcelados en el exterior aplicar para su transferencia a los Estados Unidos”, señala la fiscalía estadunidense.
Se trata, además, de la tercera transferencia de prisioneros desde Estados Unidos a México, luego de las ocurridas en agosto y abril de este mismo año.
¿Qué es el Tratado Internacional de Transferencia de Prisioneros?
Estos traslados se realizaron a través del Programa Internacional de Transferencia de Prisioneros, autorizado por el Congreso. La Unidad Internacional de Transferencia de Prisioneros (IPTU) de la División Penal, ubicada en la Oficina de Asuntos Internacionales, administra el programa y coordina todas las transferencias basadas en tratados.
A través de este programa, los extranjeros elegibles bajo custodia federal y estatal pueden, bajo ciertas condiciones, ser transferidos a su país de nacionalidad para cumplir sus condenas.
Estados Unidos mantiene actualmente 10 acuerdos bilaterales de transferencia adicionales y dos convenciones multilaterales de transferencia.
Estos mismos tratados también permiten a los ciudadanos estadunidenses encarcelados en el extranjero solicitar su transferencia a Estados Unidos.
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